¿Quién no ha sufrido el tremendo malestar que provocan las aftas bucales, más conocidas como llagas?, y ¿cómo es posible que algo tan pequeño pueda generar tanta incomodidad? Pues bien, en el blog de hoy queremos hablarte sobre esta afección oral tan común en la sociedad y cómo afecta a nuestra salud bucodental. Pero antes de empezar queremos contarte un dato relevante que a lo mejor desconocias: estas lesiones no son contagiosas.
Ahora sí, ya podemos empezar.
¿Qué son las aftas bucales?
Las aftas bucales, también conocidas como úlceras orales o llagas, son una de las afecciones más comunes en cuanto a salud bucodental. Son pequeñas lesiones que se desarrollan en la mucosa oral, localizándose principalmente en el interior de los labios, mejillas o lengua.
Las aftas bucales están caracterizadas por ser molestas, e incluso dolorosas. Suelen tener un aspecto redondeado u ovalado y un color blanquecino o amarillento. Aunque estas afecciones son benignas pueden dificultarnos actos cotidianos como comer, hablar, sonreír o cepillarnos los dientes.
¿Qué causan las aftas bucales?
Las aftas bucales también están causadas por:
Lesiones físicas:
Como puede ser una mordida accidental, un cepillado de dientes agresivo, el uso de algunos aparatos de ortodoncia o prótesis dentales, e incluso piercings.
Estrés y ansiedad:
Las emociones juegan un papel crucial en nuestra salud oral, ya que el estrés y las alteraciones emocionales pueden ser el origen de la aparición de estas.
Deficiencia nutricional:
Como por ejemplo bajo nivel de hierro, zinc o vitamina B12.
Cambios hormonales:
Especialmente durante la menstruación o en algunas etapas del ciclo hormonal.
Alimentos muy ácidos, cítricos, picantes o muy salados.
¿Afectan las aftas bucales a nuestra salud bucodental?
Aunque las aftas son afecciones benignas y temporales, sí que tienen un impacto en nuestra salud oral. Estas pequeñas lesiones al ser dolorosas pueden dificultar nuestra higiene oral (esto no quiere decir que tengamos que dejar de hacerlo, al contrario, debemos mantenerla). Si tenemos una higiene oral deficiente podemos provocarnos una acumulación de placa bacteriana y por consecuencia aumentar la posibilidad de caries o enfermedades de las encías.
¿Cómo aliviar el malestar de las aftas bucales?
La mayoría de las aftas bucales se curan de forma espontánea en un período de una a dos semanas aproximadamente. No obstante, te dejamos algunas recomendaciones muy útiles que puedes llevar a cabo para aliviar el malestar que provocan:
- Realízate enjuagues con colutorios antisépticos.
- Evita alimentos ácidos, picantes o cítricos, ya que pueden irritar la zona.
- Lleva a cabo una adecuada higiene oral.
- También puedes hacer uso de geles específicas para aliviar el dolor.
Por otra parte, aunque las recomendaciones que te damos son beneficiosas también debes de saber que, en ciertas ocasiones, es importante acudir al dentista para una revisión más exhaustiva de estas lesiones orales. ¿Cuándo recomendamos acudir a la clínica dental para tener la opinión de un profesional? Te lo contamos:
- En el caso que las aftas tengan un tamaño más grande de lo habitual y presentan un aspecto poco usual.
- En el caso que persistan en la cavidad oral más de dos semanas y no tengan signos de mejora.
- En el caso que el dolor sea intenso y no mejore con cuidados básicos en casa.
- En el caso que provoquen fiebre y sean múltiples lesiones repartidas por toda la cavidad oral.
- En el caso que el dolor dificulte de forma significativa actos cotidianos como es comer o beber.
Ya conoces un poco más sobre las aftas bucales y cómo puede afectar a nuestra salud oral, así que recuerda: no descuides tu sonrisa. Y si necesitas un dentista en el que confiar tu sonrisa, no lo dudes, busca tu Clínica W más cercana, porque encontrarás a grandes profesionales.
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